BIO

Desde que inició su carrera artística ha impulsado y promovido propuestas como MONTENEGRO, un proyecto eminentemente musical que ahonda en los sonidos de los puertos y los bajos fondos, con obras como La República del Mar o la Cárcel de amor al que ponen exquisitas voces Olga Martín e Inmaculada Herranz. La Asamblea de Extremadura en Mérida o algunos de los más hermosos jardines de museos extremeños han sido testigos de estos ecos marineros y barcos fugitivos.

Al tiempo, y para contrastar, se embarca en experiencias rockeras, acompañado de una banda de muñecos de madera y tamaño natural, y con
LA ADORACIÓN PERPETUA se presenta ante el mismísimo centro neurálgico de la Ciudad Monumental de Cáceres.

Para propuestas donde se aúnan lo musical, lo escénico y la danza ha impulsado propuestas como el
TEATRO DE LA CALLE OSCURA o LA CORREDERA TEATRO, nombres con los que ha estado presente en los más importantes festivales de Extremadura, Festival de Mérida (1995, 1996, 2006), Festival de Alcántara (1995, 1999, 2000), Festival de Teatro y Danza Contemporáneos de Badajoz (1995, 2005, 2006), así como en los grandes eventos que jalonan la agenda cultural de la Comunidad: Día de Extremadura (1999. Teatro Romano de Mérida).

Como autor de bandas sonoras RADES ha puesto nombre a un buen número de encargos, que van desde títulos teatrales (Antígona, dirigida por Paco Suárez para el Festival de Mérida, La Batalla de La Albuera, montaje anual dirigido por Paco Carrillo desde 1999, aún en cartel, Vacaciones en la Especial para Arán Dramática, Las Suplicantes, dirigida por Carmen Galarza para el Festival de Mérida, Farsa y Licencia de la Reina Castiza para el Aula de Teatro de la Universidad de Extremadura, Don Juan TV, dirigida por Paco Carrillo para la Escuela de Teatro de Extremadura, Al otro lado para la compañía Karlik Danza-Teatro, El Príncipe y el pintor, una versión libre de El Principito para Panduro Producciones, Las Pícaras Pellejas, dirigido por Olga Estecha, La guarda cuidadosa para Centinela Teatro, etc.), hasta campañas de promoción como el Día de Extremadura 20005, o el “sonido genérico” de la Institución Ferial de Extremadura (FEVAL).

Detrás de este abanico de iniciativas y proyectos está el CONSEJO LUSITANO, la casa madre, el lugar donde se fraguan buena parte de las ideas vertidas en estas líneas, y de la cual Rades es miembro fundador. Con un régimen interno configurado al modo de las antiguas hermandades, el Consejo Lusitano promueve el fomento de la cultura mestiza y la búsqueda de un estado mental que hace añicos las fronteras del Tajo y el Guadiana. Constituido en torno a la plaza del Giraldo en la ciudad alentejana de Évora, el Consejo Lusitano ha hecho de la Basílica Hispano-Visigoda de Santa Lucía del Trampal, cuya planta aparece en el mismo sello de la hermandad, su lugar de referencia y peregrinación, y bajo sus auspicios y su herencia prerromana se han puesto en marcha la gran mayoría de estos proyectos.